En cuanto al tipo de tratamiento, existen varias opciones para los pacientes con enfermedad renal crónica. Si bien se puede considerar la ferroterapia3 intravenosa, las guías clínicas recomiendan iniciar con terapia oral en aquellos pacientes que aún no precisan de hemodiálisis, ya que se trata de un formato más económico, con mayor disponibilidad y evitando así las complicaciones de la vía parenteral. Así,siguiendo las recomendaciones de la Guía NICE, se reserva el tratamiento con hierro intravenoso para aquellos pacientes con mala tolerabilidad o que no respondan al tratamiento oral pasados tres meses. Generalmente, la respuesta al tratamiento con hierro oral suele ser rápida, con una mejora subjetiva de los síntomas en las primeras semanas. La concen- tración de hemoglobina aumenta lentamente, debiendo ser normal a las 6-8 semanas, aunque se recomienda la monitorización analítica a los tres meses del tratamiento. Si a pesar del tratamiento con hierro, ya sea oral o intraveno- so, no se consiguiesen niveles aceptables de hemoglobina, a pesar de tener un índice de saturación de transferrina del 30%, habría que valorar introducir agentes eritropoyéticos, aunque generalmente esto no llega a ser necesario. Como se ha comentado, en el caso de nuestra paciente se consiguieron nive- les normales de hemoglobina tras tres meses del tratamiento oral. Se consi- guió así reponer las pérdidas ocasionadas por el sangrado posquirúrgico que presentó, disminuyendo a su vez el riesgo de progresión de su enfermedad renal crónica de base. CONCLUSIONES • Es importante el manejo correcto del paciente posquirúrgico, permanecien- do alerta ante los signos de sangrado oculto. • El manejo de un sangrado agudo tiene especial importancia en pacientes renales crónicos, por las consecuencias que podría tener sobre su patología de base. • Entre las opciones de tratamiento de la anemia ferropénica en el paciente con enfermedad renal crónica sin necesidad de hemodiálisis, la vía oral es la recomendada como tratamiento de inicio. 10